INTUICIÓN
«La intuición de Minerva, su presentimiento, se intensificaba con las palabras de Yegor que rebotaban en su cabeza. Deseaba estar equivocada, que su agudizado sentido premonitorio le fallase en esta ocasión. Interrumpió a su interlocutor, era indudable que tenía más información valiosa que darle, pero Nàcher siempre seguía un orden. No era un orden preestablecido, nunca investigaba siguiendo las pautas de manual, su instinto guiaba sus actos».
Así soy Yo, la protagonista de La Revelación, la investigadora privada Minerva Nàcher. Mi creadora me ha vuelto a ceder la palabra. Supongo que refleja en mí parte de su personalidad, al igual que mi imagen queda reflejada en esta nítida infusión. A veces mi premoniciones, pese a ayudarme en la resolución de graves delitos, son duras de aceptar y difíciles de asimilar. A pesar de ello me dedico a lo que me gusta.
Es curioso cómo, en algunas ocasiones, mi intuición me da más información que una prueba de ADN, por no hablar de mis pesadillas y premoniciones y su alto grado de fiabilidad. No soy miedosa, pero eso que conocemos como «el más allá» me produce escalofríos…